Llénate
de lectura
“La lectura impulsa a esto, conocer,
asumir posiciones como ente social y apropiarse de esa aptitud de análisis
crítico, no resiste sandeces menos ampara estupros. ¡La lectura es el cultivo
del espíritu de los pueblos!”
La décimo quinta entrega de la feria internacional del libro santo
domingo 2012 arriva a sus quinces primaveras y este aire abrileño nos invita a
concurrir la plaza de la cultura Juan
Pablo Duarte en ánimos de que es el evento nacional más importante en este
tenor y que le ha dado tanto esplendor cultural e internacionalización a la
Republica Dominicana.
El periodo ferial de la cultura promueve y fomenta la lectura,
educación, entretenimiento, no solo a través de los libros o palabra impresa,
sino más bien por medio de charlas, conferencias, tertulias, exposiciones y
disponiendo de espacio para las artes: danza, teatro, declamación… escenario de
publicaciones o puesta en circulación de obras coloquios y espectáculos
conformando un amplio crisol de actividades del festín lecto-cultural…
Su historicidad es muy rica, pues se suscitaron situaciones de
tropiezos, desmayos, que desde 1950 basamentaron la lucha y el fortalecimiento
de la algazara del cultivo intelectual y sociocultural humano en santo domingo.
Víctima de manipulaciones e intereses políticos y gubernamentales que se
adherieron en las huellas dactilares de la cronología dominicana.
Como buena comunicadora por lo de honesta, les exhorto a agendar un
intervalo en su línea de tiempo para desarrollar la lectura y comprensión e
interpretación que emergen de ella. Inquietudes, juicios de valores, conciencia,
no crear más bien refrescarla e
incitarnos a que prevalezcan lo moral, ético y la valoración del individuo en
si como sujeto social, y a su vez, gestor de la cosa pública común. Legislar
por nuestros intereses y a favor de la democracia que debe imperar aunque la
aristocracia o anarquía con vehemencia insista instaurarse.
Aprovechar las herramientas electrónicas y digitales, las bibliotecas y
aulas virtuales, centro tecnológicos y de capacitación, archivos y hemerotecas
como fuentes frías de consulta pero de
indeleble vigencia.
En la época medieval, la nobleza y los hombres acaudalados solamente
podían acceder y adquirir libros, los conocimientos y acudir a las
universidades. Estos eran puestos bajo llaves para evitar su hurto.
La palabra Libro del latín “Liber”
que significa “corteza de un árbol” se remonta a nuestros antepasados, el arte
rupestre, el hombre paleolítico y la creación del papel, la escritura; fueron
factores vitales en conjunto con las
etapas de la comunicación para el
nacimiento y crecimiento del mismo.
Recuerda: “el conocimiento
de nosotros mismos nos da la felicidad, un pueblo será salvo”.